El pasado jueves, la oficina de Madrid de la Cámara Alemana fue el escenario de la despedida de Walther von Plettenberg en un formato de pep-talk al inicio, en el que habló sobre su carrera profesional y la influencia de sus experiencias personales en ella, seguido de un Zapfenstreich y Gartenfest en el que socios, amigos y personal de la Cámara Alemana tuvieron ocasión de despedirse de él.
Durante el pep-talk, conducido por la directora de Socios y Eventos y Formación de la Cámara Alemana, Tanja Nause, Walther von Plettenberg habló sobre su formación, primero con una FP Dual en Alemania en el sector de la banca y después estudiando Economía y Derecho como forma de "seguir disfrutando de la libertad" y no volcarse de lleno en el mundo laboral.
Tras una crisis profunda personal al finalizar sus estudios universitarios, que le hace romper con su mundo hasta ese momento en una búsqueda del sentido de la vida "más allá del éxito profesional y casarse con una chica guapa", regresa a España, donde ingresa en el seminario primero en Madrid y posteriormente en Extremadura.
A pesar de sus convicciones religiosas decide que el sacerdocio no es su opción y comienza de nuevo su andadura profesional tras finalizar Teología, primero en Bilbao en la empresa de certificación TÜV Rheinland, y posteriormente en un pequeño despacho de abogados, desde donde pasó a trabajar para la Cámara Alemana, primero en el área de Jurídico para terminar 15 años después dirigiendo la institución otros 15 años.
Walther von Plettenberg destacó por encima de todas las cualidades que ha de tener un buen profesional, la capacidad de escucha, no solamente a las personas, sino también a la situación y la realidad que nos rodea. Además, la empatía, la psicología y la capacidad de anticipación a lo que está por venir, resultan fundamentales para él.
Durante su trayectoria profesional ha querido destacar a varias personas que han sido muy influyentes para él. Uno de ellos es su antecesor al frente de la gerencia, Peter Moser, de quien aprendió a "madurar y aceptar mis talentos y limitaciones", además de cómo ser una persona accesible. El otro, José Bogen, quien fuera presidente de la Cámara Alemana, y de quien admiraba "su amabilidad, señorío y generosidad". Tampoco ha olvidado mencionar la enorme riqueza que confluye en la institución gracias a sus socios y empleados y ha tenido unas palabras de reconocimiento hacia todo su equipo.
Al finalizar la charla, se celebró junto a socios, amigos y familiares un Zapfenstreich y Gartenfest en el patio de la Cámara Alemana, en un emotivo cierre a la carrera de Walther von Plettenberg al frente de la institución.